Calor mucho calor y luego frio es lo que recuerdo aquel día que fui de excursión con mis amigos a la sierra de Guadalupe aquel diciembre y sigo pensado, porque viene a mi mente el calor y el frio cuando recuerdo todo, a veces no me entiendo.
Ese día todos los amigos quedamos de acuerdo en subir por la parte noroeste de la montaña más alta a las 7 de la mañana visitar los 2 lagos pequeños que tiene y subir al mirador de acero que está en la parte más alejada, sin más al estar escalando la parte empinada y dificultosa del terreno vino una lluvia ligera de esa que parece que no moja y que disfrutas lo extraño es que no había nube alguna pero así como vino se fue, no sé hasta la fecha si fue una señal o una advertencia para lo que vendría después. Retomando el camino hacia la cima teníamos que ir haciendo camino ya que no existía alguno, eso hizo que nuestro caminar y andar fueran lentos y tomar determinados descansos para continuar, en varios momentos mi mejor amiga Yolitzin y yo veíamos en la cima o en las laderas una silueta femenina se veía muy alta, pero como en la sierra la gente de Cuautepec está acostumbrada a caminar entre ella no le tomamos importancia sin más. Realizada la travesía de llegar a la cúspide de la montaña, la vista era preciosa me hizo recordar a las historias de mi abuelo cuando vio parte del lago de Texcoco, esa agua cristalina y tan clara he imaginarme la ciudad de los espejos Tenochtitlan y andar por sus chinampas, ahhhh fue hermoso el momento. Estuvimos un rato tomando fotos y bromeando un rato, nuevamente en un momento yoli y yo vimos a lo lejos una silueta no alcance a distinguir que era exactamente, pero parecía un felino enorme, que corrió y saltaban entre los arboles como si cazara a una presa, eso me impacto pensé que mi amiga me diría algo porque creo yo que las 2 lo vimos, pero para ser que no fue así ya que mi amiga no me dijo nada y yo tampoco decidí hablar sobre el tema. Admirando la vista
decidimos continuar con nuestra travesía ya que teníamos que bajar para llegar a los 2 lagos y refrescarnos un poco, a los 10 minutos de andar por un pequeño sendero escuchamos como un rugido era muy agudo se escuchó muy fuerte, sorprendidos todos volteamos para todos lados para ver si lográbamos distinguir de donde venía ese sonido, cuando nuevamente se volvía a escuchar, pero esta vez fue tan fuerte que por un momento me dejo sorda, me agache para cubrirme los oídos y al levantarme cual era mi sorpresa, mis amigos no estaban ya no bajaba por el sendero estaba en una meseta y en frente de mío un enorme enorme lago azul, asustada volteaba para poder distinguir algo conocido, aunque a algunos poco metros estaba mi amiga inconsciente en el piso no reaccionaba por más que quiera que despertara no lo lograba, cuando a lo lejos veo a un jaguar corriendo así mí, no pude hacer nada del terror que me dio que me quede estática en el lugar, al momento de alcanzarme el jaguar empezó a dar vueltas alrededor mío como si me analizara, vi como era de unos 3 o 4 metros, su pelaje el más hermoso visto por mis ojos de tonalidades de amarillos a dorado, colmillos blancos como la nieve, sus garras tan grandes y fuertes como el acero, manchas negras que formaban el relieve de las montañas como si fuera un tatuaje y negras como el espacio mismo, pero lo más impresionante de toda su creación eran sus ojos enormes ojos redondos y azules como el lago que estaban en frente mío.
--eres tu mmmm con que eres tú, está bien si así lo quiere la naturaleza, no me opondré a sus designios, además tu Tolan tiene una fuerza similar al mío.
-Me estás hablando que está pasando aquí, donde estoy, los animales no hablan es un sueño o estoy alucinando, estoy asustada que está pasando.
--Tranquila no soy ningún animal, soy una nahuala, soy Zyanya izel mi tolan es el ocelotl, me presento yo no pertenezco a este tiempo, mi cultura era la cultura del hule y la piedra
tallada de donde provienen la gente que vive sobre el agua y camina sobre ella, soy la protectora de esta región del valle, del bosque montañas ríos mesetas, llanuras y estepas, del cielo azul y la que ve como nacen crecen viven y mueren las culturas. Ofelia te he elegido como mi sucesora, nosotros los nahuales somos seres inmortales podemos convertimos en muchos animales, pero solo tenemos un tolan que nos representa el mío es el jaguar, nosotros cuando nos cansamos de la existencia decidimos irnos o cuando nos toca transcender, debemos de elegir un heredero y ese eres tu niña, a mí ya no me queda más tiempo, pero el tiempo nuevo es para ti.
-No que está pasando, no no yo no quiero nada solo quiero regresar con mis amigos y que mi amiga este bien si eres un ser poderoso por lo que me dices por favor ayúdame a regresar de donde soy por favor
--Sé que están muy sorprendida por todo, pero con el tiempo sabrás por qué paso todo esto, a mí también me paso, el siguiente paso que tendremos que hacer es descubrí tu tolan en el lago así que prepárate en dado caso que no lo encontraras morirás en el lago y yo tendré que matar a tu amiga y tomar su tiempo de vida como sacrificio de tu fallo y tener que buscar otro protector.
Sin decirme nada más el jaguar me tomo entre sus colmillos apretando mi cuerpo sin que pudiera resistirme y me arrogo al lago, al momento de caer en el agua sentía como algo me arrastraba al fondo del abismo, al fijar la mirada vi unas criaturas pequeñas que tenían la similitud entre un zorro o un coyote pero con patas de mono, pelaje gris y espinas, me arrastraban tratando de ahogarme, me pegaban me rasguñaban y mordían, tal fue mi desesperación que les trataba de pegar pero mis esfuerzo parecían en vano, el tiempo no lo tenía en cuenta parecía una eternidad o unos segundos daba lo mismo, entre la profunda oscuridad que me adsorbía cada vez más llegaban pequeños rayos de luz cada instante con más fuerza primero eran
amarillos luego rojos y al final azules entre todos esos colores pude notar el remo de una balsa del cual lo tome con mis dos manos y con la mayor fuerza que pude, este me arrastro a la superficie y ahí pude verlo encima de una pequeña chinampa había un águila, un águila color café y ojos amarillos parecidos a los rayos de luz que entraron en el agua, sin más la chinampa se fue acercado poco a poco a la orilla, hasta que llegamos y yo aún agitada por ese temor de morir, tuve que bajar ya que el jaguar que aún estaba ahí me comentaba que había superado la prueba.
--Lo has hecho muy bien Ofelia, aun que te tomo un ciclo lo lograste, por fin después de un tiempo fluido entre mis manos a llegado la hora.
Al decir esto el jaguar dio unos pasos hacia mí y vi como de su piel emanaba un tipo de vapor denso de color rojo y entre ese vapor pude ver a una mujer, era alta su piel morena como dice mi madre color canela, su caballera lacia, larga y negra como el granito, manos largas delgadas tenues, pies ligeros cuello alto, ojos como la miel, alrededor de sus ojos un delineado de pómulo a pómulo de rojo y negro en forma horizontal, en sus antebrazos y pantorrillas llevaba tatuajes, signos que no pude reconocer, azules parecía que brillaban, vestido de manta color café y bordados en morado y plateado, ante toda su figura resaltaba su collar de oxidiana y en el centro de su pecho en forma hexagonal y sus pulseras de turquesa tanto en las muñecas como en los tobillos.
--Dame tu mano tengo un regalo para ti por ser un mucho tiempo la primera en salir del lago, serás un buen guardián me lo dijo el águila tu Tolan.
La mujer tomo mi mano y puso algo entre ellas, se sentía cálido, enseguida puso algo alrededor de mi cuello fue como si todo mi ser tuviera más fuerza y mis sentidos se agudizarán, pero no me dio tiempo de mirar que fue, ya que la mujer al darme esto siguió caminan hacia el lago me dio un gesto de reverencia y fue sumergiéndose poco a poco
en el lago hasta desaparecer y no volver a verla.
Preocupada y aun sorprendida por todo lo que paso sentí un temblor dentro de mi cuerpo, nuevamente ese sonido fuerte y lastimero en mis oídos hizo que me agachara en forma de protegerme, y escuche a lo lejos la voz de mi amiga yolitzin.
-Ofelia no te adelantes ya sabes que todos debemos de ir juntos para cuidarnos.
Mi sorpresa fue verla y que estuviera bien, estando en la sierra por el sendero al cual estábamos bajando y al parecer ella no se acordaba de nada sin más pensé fue un sueño una alucinación o que se yo, pero todo se sintió tan real, todo paso tan rápido que no alcense a comprender todo en el momento, mi amiga me dijo algo que no olvidare.
-Oye por cierto que bonito collar tienes porque no me lo habías enseñado antes, igual ese tatuaje que tienes en el antebrazo no lo tenías, cuando te lo fuiste a hacer y que significa no entiendo que dice ahí o solo es un símbolo, que bonito color azul.